miércoles, 31 de mayo de 2017

CAUSA & EFECTO según "el dispensador"... vaqueano de tempestades humanas (20)

el dispensador dice: el motivo de tu causa reside en la esencia de la voluntad, si careces de ella (voluntad), siempre encontrarás excusa para despreciar la causa y desmerecer el motivo. MAYO 31 2017.-
Mostrando áfrica 19.jpg
el dispensador dice: se puede navegar sin remos... se puede navegar sin tiempo... se puede navegar con vientos... pero no se puede navegar sin pensamientos... pero no se puede navegar prescindiendo de los sentidos... pero no se puede navegar liberado de los sentimientos... como tampoco puedes navegar cuando careces de sueños... ¿sabes qué es la esperanza?... la vela del don eterno... cuando la despliegas hacia el horizonte, lo que se impregna es el alma... de ése viaje que nutre tu karma, mientras la experiencia se teje según la brisa que te lleva hacia el deseo.  MAYO 31, 2017.-
si la puerta se abre hacia adentro... puedes entrar... 
si la puerta se abre hacia afuera... dispone los sentidos como para detectar qué ecos fluyen en el ingreso...
donde los afectos no flotan y se respiran... donde los afectos fluyen hacia afuera... vete...
hay gente que tiene cuerpo...
hay gente que tiene mirada...
hay gente que escucha sin oír nada...
hay gente que habla como si fuese espada...
hay gente que vive en la impermanencia de no ser nada...
Mostrando áfrica 19.jpg
Mostrando áfrica 19.jpg
Carmen Conde Sedemiuqse Esquimedes

No hay texto alternativo automático disponible.
TIBET.

Si la puerta no se abre, no es tu camino _/|\_

Thuk Je Che Tibet

No hay texto alternativo automático disponible.
El Buda de la medicina 

En el marco del budismo, Bhaiṣajyaguru es el «Buda de la Medicina» o el «maestro de la Medicina».
En ciertas formas de budismo Mahāyāna representa el aspecto curativo del buda histórico Sakyamuni. Algunos budistas consideran los mantras de medicina de este buda muy poderosos y eficaces para curar heridas físicas igual que para purificar karma negativo.

El panteón del budismo del gran vehículo o Mahayana, fue revelado en una serie de escrituras que comenzaron a circular en el Asia central alrededor del s. I de la era moderna. Sus representantes más importantes son las grandes figuras de la iluminación, los Budas y los Bodisatvas. Si bien es cierto que en un sentido técnico, a estos seres no se les considera como divinidades, ya que representan a individuos altamente evolucionados con un pasado enraizado en la existencia humana, de hecho, a menudo funcionan como objetos de devoción en el universo Mahayana. Emergen de un mundo misterioso de potencialidad pura, que moran en radiantes tierras espirituales o budaversos y que en ocasiones aparecen en nuestro oscuro y conflictivo mundo para auxiliar a aquellos que más lo necesitan.

La fuerza motivacional que sustenta a la actividad de estos seres, es una poderosa combinación de una mentalidad animada por el espíritu de la iluminación, con un sentimiento de profunda compasión para con todos los seres. Esta motivación es de hecho, la característica definitoria de la cosmovisión del budismo Mahayana.

El nombre completo del Buda de la Medicina: Bhaishajyaguru Vaiduryaprabha, significa Maestro de Sanación de Irradiación Lápiz Lázuli. Como el Buda histórico Sidarta Gautama y el Buda de la luz ilimitada Amitabha, usa las túnicas del Bhikshu o renunciante, el monje budista tradicional, y se encuentra sentado en la postura diamantina o de flor de loto, con sus piernas entrecruzadas. Su mano izquierda se encuentra en la postura de la meditación, descansando en su regazo y sosteniendo un cuenco lleno de néctar y frutas medicinales. Su mano derecha descansa sobre su pierna con la palma hacia adelante en el gesto de conferir bendiciones espirituales y sosteniendo el tallo de la planta del mirobálano, renombrada como la reina de las plantas medicinales, debido a su eficacia en el tratamiento de los desórdenes

En el Tibet, al Buda de la medicina se le contempla como la fuente de las artes medicinales, ya que es a través de él, que las enseñanzas encarnadas en los cuatro Tantras medicinales, la base de la medicina tradicional tibetana, emergieron al mundo. En una ocasión, el maestro de la sanación lápiz lázuli, se encontraba sentado en meditación rodeado por una asamblea de cuatro círculos de discípulos, incluyendo en esta a médicos, sabios, dioses no budistas y Bodisatvas, todos los cuales deseaban aprender el arte de la sanación. Atónitos por la radiante gloria de su presencia, se vieron imposibilitados para solicitar la deseada enseñanza. Para acomodar sus deseos no externalizados, el Buda de la medicina manifestó dos emanaciones, una para solicitar las enseñanzas y la otra para conferirlas. De esta manera, la explicación Budista de las diversas enfermedades mentales y físicas, sus causas, diagnóstico y tratamiento, así como la presentación de los métodos para lograr la prevención de la enfermedad.

Así de acuerdo a los Cuatro Tantras Medicinales: el Gyu Zhi, la causa fundamental para toda enfermedad se encuentra en los tres venenos: la ignorancia, el apego y la aversión. Estos venenos conducen al desequilibrio de los llamados tres humores: la flema, el viento y la bilis, los diferentes constitutivos corporales: sangre, carne hueso etc, y los productos de desecho o impurezas tales como el excremento, la orina y la sudoración, todos los cuales son analizados en veinticinco divisiones.

El Tantra raíz comenta:

“Si todos estos veinticinco elementos se encuentran en balance y armonía y los tres factores de los gustos, las cualidades inherentes a la comida que uno consume y el comportamiento del individuo es puro y edificante, su salud y vida florecerán. De no ser así, es certero que la salud y la vida del individuo se deterioraran.”

El tratamiento de las enfermedades y la manutención de la salud son entonces el resultado de devolver a un estado de balance a todos estos diversos elementos en el cuerpo y esto se logra, a través de la aplicación progresiva de una variedad de tratamientos. Los primeros dos implican cambios en el tipo de comida que consumimos y el comportamiento que cotidianamente manifestamos. Tan solo cuando estos ajustes se comprueban ineficaces es que el médico aconseja y prescribe el uso de medicinas, y solo cuando estas fallan, se sujeta al paciente a otros tipos de tratamiento tales como la cauterización y algunos otros. No obstante, desde la perspectiva de la medicina budista, ninguno de estos tratamientos contará con un efecto de largo plazo, si no se les acompaña con una auténtica y sincera transformación espiritual. Si la ignorancia y el resto de las emociones y actitudes perturbadas continúan deteriorando al individuo, tarde o temprano darán lugar a la emergencia de la enfermedad o cualquier otro de los incontrolables recurrentes problemas que plagan a la existencia ordinaria.

Sin embargo, el Buda de la Medicina no es venerado solamente debido a sus poderes curativos., se intenta que Bhaisayia Guru se convierta en el ideal de la naturaleza de Buda que debemos aspirar a alcanzar cada uno de nosotros. Se trata de una iluminación que puede ayudar a liberar al ser humano del sufrimiento físico y mental, y una forma de alcanzarla es a través de la meditación en torno al Buda de la Medicina, de manera que se pueda generar una enorme energía curativa para uno mismo y para la curación de los otros.
A pesar de su gran popularidad, son muy escasos los templos exclusivamente dedicados a Bhaisajyaguru o Buda de la Medicina. Los fieles que desean adorarle deben generalmente recurrir a un templo donde se encuentre su imagen.

Mantra del Buda de la Medicina.. :

TAYATA OM BEKHADZE BEKHADZE MAHA BEKHADZE BEKHADZE RADZA SAMUDGATE SOHA.


Thuk Je Che Tibet

No hay texto alternativo automático disponible.

No hay comentarios: