lunes, 3 de abril de 2017

PARALELAS PERPENDICULARES | Thuk Je Che Tibet - Publicaciones

Thuk Je Che Tibet - Publicaciones

No hay texto alternativo automático disponible.

ASTROLOGÍA TIBETANO-MONGOL Y KARMA.

Cálculos blancos y Kalachakra

En India se desarrollaron muchos sistemas similares de astrología, varios hindúes y uno budista. Los cálculos blancos llegan principalmente del sistema budista indio, encontrados en los materiales del tantra de Kalachakra. Kalachakra significa “ciclos de tiempo”, con tres niveles: externo, interno y ciclos alternos. Los ciclos externos se refieren a los ciclos a través de los cuales pasa el universo. Gracias a estos ciclos, se puede medir el tiempo exterior al mirar los tránsitos del sol, la luna y los planetas alrededor del cielo. De todas formas, el budismo define el tiempo como una medida de cambio.

Es más, los horóscopos se derivan de los ciclos de patrones que crean los cuerpos celestes con el movimiento en la relación entre sí. El estudio completo de la astronomía y la astrología está asociado a estos ciclos externos.
Internamente, también se puede medir el paso del tiempo con los ciclos del cuerpo. Por ejemplo, se puede medir el tiempo por el número de respiraciones que toma una persona.

También se puede medir por los ciclos de la vida humana de niñez, adolescencia, madurez y tercera edad, o por el ciclo menstrual en las mujeres. De este modo, existen ciclos externos e internos de tiempo y, de acuerdo a las enseñanzas de Kalachakra, son paralelos unos a otros.
Cuando miramos desde el punto de vista budista, diríamos que los seres ordinarios no tenemos control sobre estos ciclos. Los ciclos ocurren por la fuerza del karma, o por impulsos de energía. Los ciclos externos, que responden a la carta de los tránsitos de las posiciones diarias de los cuerpos celestes, “maduran” o resultan del karma general compartido. Los ciclos internos, que responden a las cartas natales y las cartas de progresión de las personas, maduran a raíz del karma individual de cada una de ellas. Sufrimos todo tipo de problemas por la falta de control de cualquiera de estas maduraciones kármicas y de su efecto sobre nosotros.

Algunas personas, por ejemplo, están fuertemente afectadas por la configuración de su horóscopo natal. Tienen dificultades no sólo con sus vidas personales, sino también con los ciclos externos, tales como inviernos largos o lunas llenas. ¡Algunas personas se vuelven un poco locas en la luna llena, ¡como si fueran hombres lobo! La gente también tiene dificultades para manejar los ciclos internos: el ciclo de desarrollo de hormonas cuando atraviesan la pubertad, el ciclo menstrual, el proceso de envejecimiento y demás. En el budismo, nos afanamos para obtener la libertad de estos ciclos recurrentes incontrolables, que llamamos samsara, y continuar para llegar a ser budas iluminados y poder así ser la mejor ayuda para los demás.
Los ciclos alternos de tiempo conllevan las varias prácticas de meditación Kalachakra para obtener la liberación y la iluminación. Este punto importante revela la orientación básica del budismo hacia la astrología. Queremos liberarnos de estar a merced de los aspectos astrológicos tales como el horóscopo.

De acuerdo al budismo, el continuum o flujo mental de cada individuo ha experimentado problemas sin principio y, si no hacemos nada por cambiar la situación, continuará experimentándolos para siempre, de una vida a otra. Esto significa que necesitamos liberarnos no sólo de nuestro horóscopo personal en esta vida, necesitamos liberarnos de todos los horóscopos posibles de cualquier futuro renacimiento sin control que ocurra. En otras palabras, aspiramos a liberarnos del zodiaco mismo.

Podemos ver desde esta aproximación que el horóscopo no es algo concreto y fijo, no es algo que dicta la manera en que definitivamente tenemos que ser sin que podamos hacer nada al respecto. Queremos liberarnos de cualquier restricción imaginable y, para hacerlo, necesitamos tener una idea de los detalles de nuestro horóscopo específico y del horóscopo en general. Este es entonces el contexto en el cual necesitamos estudiar astrología, tanto si es tibetano-mongol, hindú, chino, árabe, maya u occidental.

Deseamos superar, no sólo el estar bajo el control de nuestro horóscopo personal de esta vida, sino también el estar bajo control de todos los ciclos constantemente cambiantes del tiempo, medidos por el movimiento de los cuerpos celestiales. Es crucial comprender este punto, de no hacerlo, podríamos caer fácilmente en la trampa de llegar a ser supersticiosos con la astrología, en especial con la astrología tibetano-mongol, ya que se refiere tanto a días “ favorables” como “desfavorables”.

Thuk Je Che Tibet


No hay texto alternativo automático disponible.

No hay comentarios: